07-14-2005, 11:10 PM
El orgasmo múltiple masculino
Para hablar sobre el orgasmo múltiple masculino es necesario explicar algunos datos de la fisiología y realizar distinciones básicas.
El varón en la mayoría de los casos no es multiorgásmico. Se calcula que solamente el 10% tiene la capacidad de tener más de un orgasmo consecutivo en una relación sexual.
Luego de la eyaculación, se produce un hecho fisiológico denominado “Período refractario”. Consiste en un tiempo de recuperación en el cual los componentes del aparato genital vuelven a su posición y estado inicial (basal) previo a la estimulación sexual. Hasta que no se complete ese tiempo, no es posible otro acto sexual completo, el varón no responde favorablemente a los estímulos sexuales e incluso suele sentir rechazo por los besos, las caricias o la penetración. El tiempo de duración de este período es variable, y depende de factores tales como la edad, la herencia, la atracción sexual por la pareja, la calidad de los estímulos sexuales recibidos, etc.
Queda claro entonces que en la mayoría de los casos es necesario un tiempo de espera para retomar la actividad sexual luego de una eyaculación. Sin embargo, los orientales (expertos en artes amatorias) han desarrollado hace cientos de años algunos métodos para posibilitar lo que se denomina el “Orgasmo múltiple masculino”.
¿En qué consiste el mismo?
En primer lugar es necesario diferenciar entre orgasmo y eyaculación.
El Orgasmo es la sensación subjetiva de placer que el varón siente luego de una fase de excitación máxima que se denomina “meseta”, y que fisiológicamente está acompañada por una serie de contracciones de un grupo de músculos denominados “Pubococcígeos”, los cuales se encuentran en la base del Pene y el Perineo (la zona ubicada entre el ano y los genitales).
La Eyaculación es la expulsión del semen que recorre un camino que va desde las glándulas en las cuales se almacena (Próstata y Vesículas seminales) hacia la Uretra (conducto que transporta el semen y la orina) y luego al exterior.
La Eyaculacion a su vez se divide en dos fases: la fase de inminencia o emisión y la de inevitabilidad o expulsión. Durante la fase de inminencia el semen se deposita en la base de la Uretra y el varón siente un cosquilleo en su pene que anuncia la llegada de la eyaculación. Pocos segundos después (aproximadamente dos) el varón tiene la sensación de que su eyaculación ya es inevitable, haga lo que haga, y se produce la expulsión del semen.
Realizadas estas distinciones, es fundamental señalar que aunque el orgasmo y la eyaculación están generalmente asociados, fisiológicamente hablando son parcialmente independientes. Por lo tanto, es posible que por determinadas situaciones (a veces patológicas) se produzca uno sin el otro: orgasmo sin eyaculación o eyaculación sin orgasmo.
El Orgasmo múltiple masculino es producto de un entrenamiento por medio del cual se logra disociar el orgasmo de la eyaculación, alcanzando el orgasmo con todas sus sensaciones características pero sin expulsar el semen. Eso posibilita sostener el Pene erecto y continuar con la relación sexual, teniendo luego otros orgasmos consecutivos sin pasar por el período refractario. Técnicamente este hecho se denomina “orgasmo seco”, ya que se produce el orgasmo con sus contracciones y sensaciones pero sin expulsar el semen.
En la próxima entrega presentaremos un programa de ejercicios para ampliar la experiencia sexual y alcanzar el orgasmo múltiple masculino.
Para hablar sobre el orgasmo múltiple masculino es necesario explicar algunos datos de la fisiología y realizar distinciones básicas.
El varón en la mayoría de los casos no es multiorgásmico. Se calcula que solamente el 10% tiene la capacidad de tener más de un orgasmo consecutivo en una relación sexual.
Luego de la eyaculación, se produce un hecho fisiológico denominado “Período refractario”. Consiste en un tiempo de recuperación en el cual los componentes del aparato genital vuelven a su posición y estado inicial (basal) previo a la estimulación sexual. Hasta que no se complete ese tiempo, no es posible otro acto sexual completo, el varón no responde favorablemente a los estímulos sexuales e incluso suele sentir rechazo por los besos, las caricias o la penetración. El tiempo de duración de este período es variable, y depende de factores tales como la edad, la herencia, la atracción sexual por la pareja, la calidad de los estímulos sexuales recibidos, etc.
Queda claro entonces que en la mayoría de los casos es necesario un tiempo de espera para retomar la actividad sexual luego de una eyaculación. Sin embargo, los orientales (expertos en artes amatorias) han desarrollado hace cientos de años algunos métodos para posibilitar lo que se denomina el “Orgasmo múltiple masculino”.
¿En qué consiste el mismo?
En primer lugar es necesario diferenciar entre orgasmo y eyaculación.
El Orgasmo es la sensación subjetiva de placer que el varón siente luego de una fase de excitación máxima que se denomina “meseta”, y que fisiológicamente está acompañada por una serie de contracciones de un grupo de músculos denominados “Pubococcígeos”, los cuales se encuentran en la base del Pene y el Perineo (la zona ubicada entre el ano y los genitales).
La Eyaculación es la expulsión del semen que recorre un camino que va desde las glándulas en las cuales se almacena (Próstata y Vesículas seminales) hacia la Uretra (conducto que transporta el semen y la orina) y luego al exterior.
La Eyaculacion a su vez se divide en dos fases: la fase de inminencia o emisión y la de inevitabilidad o expulsión. Durante la fase de inminencia el semen se deposita en la base de la Uretra y el varón siente un cosquilleo en su pene que anuncia la llegada de la eyaculación. Pocos segundos después (aproximadamente dos) el varón tiene la sensación de que su eyaculación ya es inevitable, haga lo que haga, y se produce la expulsión del semen.
Realizadas estas distinciones, es fundamental señalar que aunque el orgasmo y la eyaculación están generalmente asociados, fisiológicamente hablando son parcialmente independientes. Por lo tanto, es posible que por determinadas situaciones (a veces patológicas) se produzca uno sin el otro: orgasmo sin eyaculación o eyaculación sin orgasmo.
El Orgasmo múltiple masculino es producto de un entrenamiento por medio del cual se logra disociar el orgasmo de la eyaculación, alcanzando el orgasmo con todas sus sensaciones características pero sin expulsar el semen. Eso posibilita sostener el Pene erecto y continuar con la relación sexual, teniendo luego otros orgasmos consecutivos sin pasar por el período refractario. Técnicamente este hecho se denomina “orgasmo seco”, ya que se produce el orgasmo con sus contracciones y sensaciones pero sin expulsar el semen.
En la próxima entrega presentaremos un programa de ejercicios para ampliar la experiencia sexual y alcanzar el orgasmo múltiple masculino.
Tengo Ganas de ti, de tu aroma y de tu ser,
de tu sabor y de tu piel,
de sentirte y hacer,
aquello a lo que tu llamas placer.
de tu sabor y de tu piel,
de sentirte y hacer,
aquello a lo que tu llamas placer.