Calificación:
  • 0 voto(s) - 0 Media
  • 1
  • 2
  • 3
  • 4
  • 5
¿Qué es el high end?
#2
Confusedhock: Ahí les dejo este apuntito que tome prestado de la página:

http://club.telepolis.com/adrodriguez/amplificador.html

LA AMPLIFICACION


--------------------------------------------------------------------------------


La potencia del integrado o etapa, debe ir en consonancia con la sala a sonorizar. Todo altavoz tiene una sensibilidad medida en dB/w/m, e indica los decibelios que ofrece atacados por una señal de 1 vatio a 8 ohmios medidos a una distancia de 1 m, suele estar para un buen altavoz entre 86 y 94 dB. Teniendo en cuenta que oímos decibelios y no vatios, el volumen de escucha está entre 60 (una conversación) y 110 dB (una discoteca), la sensibilidad media de un altavoz (86 a 94 dB) y una distancia media al oyente de 3 m. una regla sencilla es multiplicar los metros cuadrados de la sala por 7, resultando la potencia recomendada de amplificación (en una sala de 10 m2 basta con 70 vatios continuos). El amplificador nos da potencia en vatios, que conectado a unos altavoces con sensibilidad e impedancia determinadas, se convierten en decibelios de presión sonora que oímos, pero hay muchas medidas y argumentos comerciales para vender, la medida ideal deben ser vatios RMS o continuos (potencia máxima capaz de entregar de forma continuada); otras como DIN (bastante usada), musicales, PMPO, etc, llevan a confusión.

Referente al modo de amplificación, existen cinco clases útiles para audio; A, B, AB, Super A y D. la clase A, muy apreciada, consume más energía (más vatios, ya que siempre está consumiendo el máximo, incluso en ausencia de señal), suele ofrecer menos potencia de salida (debido a su funcionamiento el aprovechamiento de energía suele estar en torno al 20%), disipa bastante calor, pero su sonido es mucho más preciso y musical, debido a que el mismo circuito amplifica todo el ciclo de onda, por lo que la distorsión de cruce es nula, y ofrece menos distorsión armónica (THD). La clase B, muy extendida en alta fidelidad, consume menos (sólo consume la etapa de potencia si hay señal de audio, aumentando el consumo cuanto mayor es la señal), ofrece más potencia (rendimiento de energía sobre el 50%), pero colorea más la señal (sonido menos puro al utilizar dos circuitos de amplificación, cada uno para un semiciclo de onda, en el punto de unión de ambos semiciclos se producen interferencias que provocan distorsión de cruce, y aumentan la distorsión armónica). En un término medio está la clase AB; consumo medio (se comporta a mitad de camino entre la clase A y B, la señal se amplifica por dos circuitos como en clase B, pero cada uno amplifica más de 180o de onda y menos de 360o), pureza a baja potencia de clase A, y fuerza a alta potencia de clase B. La clase super A se aplica exclusivamente a aparatos de referencia, con precios realmente elevados, y mejora el aprovechamiento de energía de la clase A básicamente. La clase D aprovecha hasta un 90% de la energía entrante, pero ofrece mucha distorsión en altas frecuencias; su utilización es con filtros pasabajos para aplicaciones en subwoofers, donde ofrecen potencias incluso superiores a 500 vatios sin apenas disipar calor y ofreciendo márgenes de distorsión bajos a estas frecuencias.



Las electrónicas a válvulas, ofrecen un sonido cálido y musical, pero están asociadas exclusivamente al high end, por lo que sus precios suelen dispararse, resulta difícil encontrar repuestos (salvo en grandes ciudades, donde hay representantes), y ofrecen potencias limitadas y alto consumo (siempre clase A o super A). Los transistores tienen generalmente un sonido menos humano (desde un punto de vista audiófilo), aunque son más económicos, ofrecen más potencia (suelen ser clase B o AB, aunque en aparatos de calidad se encuentran transistores en clase A), son más rápidos y tienen mayor extensión en graves. Dentro de estos, existen los basados en transistores de efecto de campo (MOS-FET), con calidad de sonido comparable a las válvulas, sin llegar a los precios de éstas generalmente. En un término medio están los híbridos; combinan válvulas (normalmente en la etapa de previo) con transistores (en la etapa de potencia) que además suelen ser de tipo MOS-FET, configurados en clase A, con calidad excelente y buenos precios.

También está la opción de un integrado o conjunto previo-etapa. Lo segundo ofrece mejor musicalidad, dinamismo, etc, al separar ambas partes del proceso de amplificación, también es más costoso a iguales prestaciones. El término medio en calidad y economía, un buen integrado (fuente de alimentación bien diseñada, sobrada en potencia, recorridos de señal cortos, entradas suficientes, etc) con construcción interna doble monofónica. Se encuentran integrados muy buenos desde 540 €, excelentes desde 1.500 € y referencias desde 3.000 €. Los precios para conjuntos previo-etapa son más elevados a iguales prestaciones, llegando los aparatos de referencia hasta varias decenas de miles de €. En cualquier caso lo ideal es probar y escuchar distintos modelos, mejor con el resto de nuestro equipo y en nuestra sala, y decidir uno mismo, dependiendo del requerimiento de potencia, presupuesto, etc.

Detalles audiófilos que dicen bastante sobre la calidad de estos componentes y se observan a simple vista, en los que podemos fijarnos al probarlos son entre otros que las conexiones estén chapadas en oro, disponga de conexiones balanceadas (XLR), no disponga de controles de tono, y si los tiene, con opción de fuente directa (puentear los controles de tono), disponga de salida de señal de previo, que su arquitectura sea balanceada, su peso puede indicarnos si dispone de una fuente de alimentación bien dimensionada.



La fuente de alimentación es el corazón del amplificador, al decaer la impedancia del altavoz conectado según las frecuencias, los requerimientos de energía para ese altavoz son mayores. En teoría, al dividir por dos la impedancia a la salida del amplificador, la potencia requerida se multiplica por dos, pero esto depende de la capacidad para entrega de corriente de la fuente del amplificador, la proporción para una buena fuente es a partir del 70-80% más de su potencia RMS al dividir por dos la impedancia; con 70 vatios RMS a 8 ohmios debería entregar 120 vatios a 4 ohmios. Si la fuente no está bien dimensionada (transformadores de alta corriente) puede ocurrir que al decaer la impedancia, los requerimientos de potencia para el altavoz superen lo que puede entregar el amplificador, activando los circuitos de protección del mismo en el mejor de los casos, si los posee.

Pequeñas mejoras aplicables a estos componentes son, si disponemos de previo-etapa, junto al reproductor de CD, o en cualquier caso si el conjunto son tres tomas de corriente o múltiplo, se pueden enlazar los cables de alimentación formando trenzas, desde la base de los cables, en el aparato, hasta los enchufes en la pared o regleta. Esto permite que la señal de alimentación de corriente a cada aparato llegue mucho más limpia, al hacer de filtro de red, influyendo en una mejora del sonido que ofrezca. También se puede cuidar el cable de alimentación de la red eléctrica, sustituyendo el de serie por modelos con filtros (apantallados, ferritas, etc) para eliminar parásitos que interfieren en la corriente, hay que tener en cuenta que el sonido final proviene de la energía eléctrica que alimenta al aparato, por tanto esta habrá que cuidarla también, y en este aspecto cabe destacar que durante el día la corriente es más inestable que por la noche, básicamente porque durante el día se ve afectada por alteraciones (debido al mayor consumo diurno; fábricas, comercios, etc. que producen picos y caídas de tensión) e interferencias (tráfico de vehículos, radiofrecuencias, etc). Sustituir los pies que trae de serie por conos con bases, ayuda a eliminar vibraciones (al reducir la superficie de contacto con su base) y mejora la ventilación del aparato.

Una recomendación sencilla, y que influirá en la vida útil del equipo, es seguir un orden correcto al encenderlo o apagarlo; se debe encender comenzando por las fuentes de señal (reproductor de CD) y acabando por la etapa de potencia (o integrado), y al desconectarlo, en sentido inverso, desde la etapa o integrado hacia las fuentes. Con ello se evita que llegue señal a cada aparato (y los altavoces en último lugar) desde el anterior en el sentido en que circula el sonido (corriente eléctrica), donde pueden producirse picos o caídas propias del encendido o apagado en cualquier aparato eléctrico.

Igualmente hay que tener muy claro, a la hora de seleccionar cada pieza de nuestro equipo, que el conjunto siempre sonará con la calidad del peor de los componentes que tengamos conectado, por tanto de poco vale buscar un buen amplificador si lo conectamos a unos altavoces mediocres o una mala fuente de señal.
Cuauh
Responder


Mensajes en este tema
¿Qué es el high end? - por Cuauh - 01-08-2004, 03:13 PM
Pa que se vayan animando - por Cuauh - 01-08-2004, 03:41 PM
[Sin título] - por Gustavo - 01-08-2004, 04:07 PM
Ok - por cinescape - 01-08-2004, 04:17 PM
[Sin título] - por Eduardo-AAVM - 01-11-2004, 12:47 AM
[Sin título] - por Eduardo-AAVM - 01-11-2004, 12:59 AM
[Sin título] - por Jorge E. López H. - 02-03-2004, 08:24 PM
[Sin título] - por Gustavo - 02-03-2004, 08:44 PM
[Sin título] - por Jorge E. López H. - 02-03-2004, 11:37 PM
[Sin título] - por Eduardo-AAVM - 02-04-2004, 01:58 AM

Salto de foro:


Usuarios navegando en este tema: 1 invitado(s)